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A esa chica la había visto en un carruaje amarillo y que desde ese momento le había fascinado instantáneamente y que no pudo dejar de pensar en ella y que después se estuvo paseando por esa calle para ver si podía verla de nuevo. Una semana después la vio. La primera vez que le habló fue un mal comienzo, según él, también se sentía estúpidamente enamorado. Le pidió que si podría volver a verla y ella con un poco de duda le dijo que a las cinco menos cuatro. El día de la cita llegó puntualmente pero le dijo que lady Abroy ya había salido, le mandó una carta a su casa pero ella le pidió que no…mehr

Produktbeschreibung
A esa chica la había visto en un carruaje amarillo y que desde ese momento le había fascinado instantáneamente y que no pudo dejar de pensar en ella y que después se estuvo paseando por esa calle para ver si podía verla de nuevo. Una semana después la vio. La primera vez que le habló fue un mal comienzo, según él, también se sentía estúpidamente enamorado. Le pidió que si podría volver a verla y ella con un poco de duda le dijo que a las cinco menos cuatro. El día de la cita llegó puntualmente pero le dijo que lady Abroy ya había salido, le mandó una carta a su casa pero ella le pidió que no lo volviera a hacer y que se las mandara a otra dirección, era tan misteriosa que lord Murchison pensaba que estaba bajo la posesión de algún hombre pero después abandonó esa idea. Un après-midi, j’étais assis à la terrasse du café de la Paix, contemplant la splendeur et les dessous de la vie parisienne. Tout en prenant mon vermouth, j’étudiais avec curiosité l’étrange panorama où l’orgueil et la pauvreté défilaient devant moi, quand je m’entendis appeler par mon nom. Je fis demi-tour et je me vis en face de lord Murchison. Nous ne nous étions pas revus depuis que nous avions été au collège ensemble, il y avait dix ans de cela. Aussi fus-je charmé de cette rencontre. Nous échangeâmes une chaude poignée de main. À Oxford, nous avions été grands amis. Je l’aimais énormé-ment. Il était si bon, si plein d’entrain, si plein d’honneur. Nous disions souvent de lui qu’il serait le meilleur garçon du monde sans son penchant à dire toujours la vérité, mais je crois que réellement nous ne l’en admirions que davantage pour sa franchise. Je le trouvai bien un peu changé.