
LOS SUEÑOS
Una sátira del juicio final y la condición humana
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"Los Sueños" de Francisco de Quevedo es una obra satírica que explora la naturaleza humana a través de una serie de visiones oníricas. En el "Sueño de las Calaveras", Quevedo imagina el día del juicio final, donde los muertos resucitan para enfrentar sus pecados. La narración comienza con la descripción de un joven que toca una trompeta, despertando a los muertos de sus tumbas. A medida que los cuerpos se levantan, se observa cómo cada uno reacciona de manera diferente según su vida pasada: los avariciosos buscan sus riquezas, los lujuriosos intentan ocultar sus ojos, y los escribano...
"Los Sueños" de Francisco de Quevedo es una obra satírica que explora la naturaleza humana a través de una serie de visiones oníricas. En el "Sueño de las Calaveras", Quevedo imagina el día del juicio final, donde los muertos resucitan para enfrentar sus pecados. La narración comienza con la descripción de un joven que toca una trompeta, despertando a los muertos de sus tumbas. A medida que los cuerpos se levantan, se observa cómo cada uno reacciona de manera diferente según su vida pasada: los avariciosos buscan sus riquezas, los lujuriosos intentan ocultar sus ojos, y los escribanos huyen de sus propias orejas para no escuchar las acusaciones en su contra. El autor utiliza este escenario para criticar a diversas figuras de la sociedad, como mercaderes, médicos, jueces, abogados y taberneros, mostrando sus vicios y corrupciones. A través de personajes como un juez que se lava las manos repetidamente o un médico perseguido por las almas de aquellos que mató con sus tratamientos, Quevedo expone la hipocresía y la inmoralidad de su tiempo. La obra también incluye una crítica a los poetas y filósofos, quienes, en su locura, intentan desafiar incluso a Júpiter. El "Sueño de las Calaveras" es una reflexión sobre la justicia divina y la inevitabilidad del juicio, donde cada individuo debe rendir cuentas por sus acciones. Quevedo utiliza el humor y la ironía para subrayar la futilidad de las excusas humanas y la certeza de la retribución divina.